Desnuda tu mente
Escrito por David

En toda situación vivida siempre hay que estar preparado para lo que pueda suceder tras lo acontecido. Es una llama viva...
Había sido un día muy intenso y por eso al llegar a casa se tumbó sobre la cama.

Permaneció con la mirada perdida en la claridad del techo mientras en su cabeza se agolpaban las voces más oscuras de sus deseos más profundos. Su hambre de Dominante no se saciaba de forma fácil porque la vida real bdsemera no existe sin una parte sumisa.

El Ying-Yang del placer innato sucumbe ante la vejación de no compartir lo que se disfruta. Forzar lo que no es sentido lleva a la frustración. ¿Quién quiere azotar a quién no lo desea? El demonio está en los detalles. ¿Quién quiere serlo hasta el juicio final por el solo capricho de serlo? ¿Quién osa desposeer el poder de educar a quién es de tu Propiedad? ¿El destino? Ese que habla de un hilo rojo al que estás unido o el extremo deshilachado de una mala cuerda. Esa cara B a los que muchos quieren aferrarse cuando parece todo perdido. Siempre hay un matiz como un punto sobre la 'i". Puntilloso. Talibán. Doctrina. Egoísta. Idolatra. Impaciente. ¿Qué? Toda filosofía tiene su historia. Pilares del sustento mentor que soportan todo aquello que rige la curiosidad de la vida. Se tú. Da. Quién da recibe. Una gota en el desierto predica en el océano de las utopías. Grito ahogado de las lamentaciones. Consecuente. ¡Mima cada detalle, ángel caído! Nada es singular si no es antes
especial.

-“Buenas noches, Señor”.

Al entrar en la aplicación observa que está escribiendo y contesta:

-“Buenas noches, señorita nocturna. Me alegro de volver a leerte."
-“Agradezco que me dejara este tiempo de organización de mis ideas después de nuestro último momento juntos. Como le dije necesitaba encajar las nuevas sensaciones que se habían liberado. Siempre me ha dicho que la libertad de ser una misma debe surgir sin prejuicios.”
-“Así es. La mente es un arma muy poderosa. Nadie está a salvo de ella. La sociedad la adoctrina en la falsa seguridad de un rebaño convencido.” Respondió de pie junto a la cama.
-“Quiero que sepa que no me he quitado en ningún momento Su Collar, pero…”

De repente ya no estaba en línea. El teléfono comenzó a sonar, pero un número privado aparecía en la pantalla. ¡¡Qué demonios!!” En el mejor momento de la conversación esta llamada inoportuna.

-“¿Sí?”
- “No es lo mismo si no está sujetando Usted de la correa”.
- “Cachorrita”