Frustración placentera
Escrito por Consexo Educado

Estábamos en un restaurante, cenando tranquilamente, y hablando de cosas cotidianas. Me excusé y fui al lavabo. Una vez allí, me mojé ligeramente el cuello, estaba excitada, me miraba con profundidad, con picardía. Sonreí al espejo y me quité el bonito tanga de encaje negro que llevaba.
Volví a la mesa y se lo puse encima de la mesa
Él abrió los ojos, sorprendido y lo cogió para guardárselo en el bolsillo, al sacar la mano se la olió mirándome con maldad.

(…)

Entramos en el ascensor, y nada más que pulse el botón me puso contra la pared, inmovilizándome las manos encima de mi cabeza, con su boca muy cerca de mí, notaba su olor embriagador, el pulso lo tenia a cien. Entonces me beso, con pasión y urgencia, apretando su cuerpo contra el mío, podía notar como algo crecía en su entrepierna ligeramente. Me metió la lengua y dejo una mano agarrándome las mías y con la otra, me agarro el cuello para juntarme mas a el y morderme.
Se retiró, me soltó las manos y me paso un dedo por los labios y luego con el dorso me acaricio por fuera del vestido, ligeramente, casi sin notarlo
Llegamos al piso donde estaba la habitación. Entró él primero y yo tímidamente, detrás. Se sentó en la cama y me dijo
Desvístete, por favor- era autoritario pero educado
Yo obedecí sin dudarlo. Me quité el vestido y lo dejé caer
Arrodíllate
Así hice. Me quede desnuda, a cuatro patas, con la cabeza mirando el suelo, sumisa y vulnerable
Se acerco a mi y me paso un dedo por la columna, erizándome el pelo de la nuca
Quieta
Le oí alejarse, pero no me moví.
Volvió al poco, desnudo, pasándome la mano por el costado, me abrió ligeramente las piernas y me observó, tocándome la cara interna de los muslos, se acercó más y me olio. Yo notaba mi entrepierna humedecerse. Volvió a la parte de adelante y me cogió del pelo, para hacerme levantar la cabeza. Tenia su polla tan cerca…quería lamerla. Me la acerco más, rozando mis labios, me estaba tentando, pero me había pedido estar quieta. Sonrió juguetón
Se volvió a sentar en la cama y tiro un cojín al suelo
Vamos a ver esa boquita de mi sumisa. Ven. Quiero ver si es tan juguetona como su dueña
Yo me acerque y le mire suplicante, me moría de ganas de probarla, me hizo un gesto de aprobación y empecé. Le pasé la lengua por la puntita, muy suave con dulzura, me la metí en la boca y jugué con mi legua en ella, tocando los bordes, la raja, babeándola, sin dejar de mirarle
Después mi legua paso por la base de su polla de arriba abajo, luego por un lateral y por el otro, dejándola húmeda, y viendo cómo iba palpitando y creciendo. Con una mano esparcí las babas mientras mi legua se centraba de nuevo en la punta …entonces su polla escupió un poco de liquido presimininal, y me excité sobremanera, lo cogí con la lengua y me lo tragué, mirándole con deseo. Salive más y me metí la polla entera en la boca, hasta el fondo, notando como acababa de crecer, empecé a chuparla con mas energía, coordinándome con la mano, me la deje dentro, hasta la arcada, salivándola aún más, así una y otra vez. Mi boca paso a sus huevos, mientras mi mano seguía tocándosela. Los metí en mi boca y los masajeé con mi legua, la saliva se caía hasta el culo. Seguí el reguero con mi legua hasta ahí, donde empecé a jugar con la lengua. Oía como se estremecía, y gemía guturalmente, bajo mis caricias y mis besos húmedos

De repente me paró, me cogió de la barbilla y me levanto hasta donde estaba el, me beso apasionadamente, me retiro el pelo para besarme el cuello, su lengua subió hasta mi oreja y me dijo suavemente

Túmbate en la cama boca arriba
Así lo hice, sin dejar de mirarle, con su pene erecto, atándome a la cama de pies y manos. Así inmovilizada, a su merced.
Me acabo tapando los ojos, me beso en la boca sexualmente, jugando con su lengua, cogió una fusta, y con la parte suave me la paso desde el cuello hasta el sexo. Gemí suavemente… me golpeo la entrepierna
Chss, te correrás cuando yo te deje. Avísame cuando te vayas a ir
Cogió la fusta con la otra mano, y me acaricio la entrepierna con su mano, satisfecho de notarla húmeda, me acaricio el clítoris, cada vez mas rítmico e intenso, yo empecé a gemir y cuando estaba a punto le avisé, y me golpeo en el clítoris con la fusta, haciendo que no me corriese.

Lo hizo una y otra vez, sin dejarme correr, parándome con la fusta antes de llegar, yo me retorcía de placer y frustración, deseaba tanto correrme, pero me encantaba estar así, bajo sus manos
De repente me metió dos dedos, humedeciéndose conmigo, mientras con la otra me acariciaba el clítoris, yo gemía más fuerte, retorciéndome, y cuando estaba a punto, sin siquiera decírselo paró; lloriquee como un Perrin al que le quitaran su juguete. Sus dedos siguieron entrando y saliendo de mí, mientras su boca tocaba mi clítoris, mordiéndolo suavemente, luego empezó a subir con su lengua por mi cadera, por las costillas, haciéndome estremecer, hasta llegar a mis pechos, donde se entretuvo con mis pezones, poniéndolos duros, los lamio y mordió variando la intensidad mientras me penetraba con sus dedos, mojándoselos cada vez más, pero sin dejarme llegar, golpeándome el coño con su mano.

Subió con su lengua por el cuello, excitándome más si fuera posible,

¿Me deseas mi sumisa?
Si, mi Amo- le dije suplicando,
¿Deseas que te deje correr?
Si por favor
Aun no…aguanta
Me besó en la boca y me quitó la venda, me estaba mirando tan divertido…sacaste los dedos de mi coño, mojados y se los lamio, eróticamente, luego me besó cogiéndome del cuello
Se puso encima mío mientras me besaba con su polla erecta a mas no poder, notando mi humedad…yo excitadísima, su lengua jugando con la mía, sabiendo uno al otro, y envolviendo su polla con los labios de mi vagina, masturbándose. No pude evitarlo.

FOLLAME AMO- Le suplique
Chss, mi sumisa, calma…- dijo. Cogió el tanga que le regale de la mesilla, lo olio y me la metió en la boca- saboréate, estas riquísima
Su lengua paso a mi cuello mientras su pene empezó a jugar en mi entrada, metió la puntita un poco, y la retiró, la metía y sacaba, hacía círculos mientras yo me retorcía de placer, notando las cadenas en mis manos y pies, y su lengua en mi cuello, su mano en mis pechos

¿quieres que te folle, mi sumisa? - dijo acariciándome los labios sensualmente mientras me miraba con picardía
MMMM- no podía pronunciar mas
¿Seguro?
MMMMMMMM
Así me gusta
Y me penetró, suavemente, con calma, haciendo que notara cada centímetro dentro de mí, hasta llegar al fondo y se quedó allí unos segundos, hasta que comenzó a moverse adelante y a atrás, una y otra vez cada vez más rápido. Me la metía una y otra vez, sin piedad, mi respiración mas intensa, mi pulso a mil, mis gemidos los frenaba la braga. Me la retiro y me dijo:
Córrete para tu Amo
No tardé en obedecerle, me corrí mojando su polla dentro de mí, pero no paro, siguió follándome sin parar, yo corriéndome una y otra vez, hasta dejarme exhausta. Me quito las esposas de las manos y los pies. Una vez liberada, me baje de la cama y me puse de rodillas, con la lengua fuera haciéndole ver que quería que se corriera en mi boquita, quería notar su leche. Él satisfecho con la iniciativa se puso delante de mí, con su erección apuntándome

Se la empecé a comer, rozándole con mi lengua y mis labios, lo notaba… estaba apuntito, me la empecé a meter hasta el fondo, ahogándome con ella hasta que echó la cabeza atrás de placer con un gemido gutural y su leche salió llenándome la boca, y cayendo sobre mi pecho. Me tragué lo de mi boca y con un dedo recogí lo que cayó sobre mi pecho para luego lamerlo, mirándole.
Él me miraba satisfecho mientras le limpiaba su pene, hasta dejárselo impoluto
Buena perrita.